Un mar azul intenso, unos acantilados que emergen de unas aguas transparentes y llenas de vida, un cielo despejado que invita a respirar naturaleza y aire fresco… Lo cierto es que pocas vistas son tan cautivadoras y maravillosas como las que se pueden apreciar desde el famoso Balcón de Europa, uno de los miradores más aclamados y mejor situados de la localidad de Nerja. Turistas y lugareños se dan cita aquí a diario para charlar, recorrer el paseo marítimo o, simplemente, disfrutar de la visión de un paisaje único.
Desde aquí se pueden apreciar las múltiples playas y calas que forman la costa andaluza de Málaga e incluso de Granada, a las cuales se puede acceder tanto en coche como en pie para darse un refrescante chapuzón. Además, los restaurantes situados a poca distancia permitirán degustar algunos de los platos típicos de la cocina andaluza, como el pescado frito o las sardinas asadas.
Pero hay otro hecho que influye en que sean muchas las personas que adoran el Balcón de Europa. Aquí era donde los personajes de la mítica serie española Verano Azul se citaban para jugar en la playa y pasar los días estivales viviendo historias inolvidables. Desde el Balcón de Europa los pequeños protagonistas emprendían mil y una aventuras que, ahora, se recuerdan con cariño y un cierto toque de nostalgia. Así, la televisión ha contribuido en gran medida a convertir este mirador en uno de los iconos más representativos del país, que ya pertenece al imaginario colectivo de todos los ciudadanos.
Nerja es un pueblo malagueño que se hizo famoso gracias a la serie de TVE «Verano Azul».
Tiene una larga historia probada por las pinturas encontradas en la famosa Cueva de Nerja descubierta en 1959 y hoy en día es el sitio turístico español más visitado tras el Museo del Prado de Madrid y la Alhambra de Granada. Bajo el reino musulmán, el nombre era Narixa, que significa «fuente abundante» y que es el origen del nombre actual.